El pasado día 13 de
Noviembre, se dio por iniciado un periodo de negociación sobre un plan
anticrisis que ya nos adelantó el director general en una reunión los días 4 y
5 a la totalidad de la plantilla.
Durante estos meses
hemos tenido un total de ocho reuniones en las que el Comité de Empresa le ha trasmitido
a la dirección, por activa y por pasiva, que los trabajadores de TRI no somos
los culpables de la situación generada por el mercado ni de la ineptitud y
nefasta gestión de la dirección de esta empresa. Nosotros no somos los
culpables y ni mucho menos, tenemos que financiar las deudas de la empresa.
Nosotros no somos los culpables de no saber hacer el tubo bien a la primera, ni
a la segunda, ni a la tercera, pero sí somos conscientes de que esta situación
nos está llevando al precipicio. Prueba de todo esto, es ver cómo está el parque de chatarra donde hay miles de
toneladas de tubos de chatarra.
Vamos hacer un poco de
memoria:
Todo empezó en el 2007 ………
El
Grupo Tubos Reunidos dispone de una situación financiera excelente y
totalmente
saneada que le permite soportar y acometer sin problemas la
recompra
de acciones proyectada para su posterior amortización..
………………….
El
número máximo de acciones a amortizar, se ha cuantificado en función del
referido
precio mínimo y una aproximación al importe de las reservas
disponibles
para este fin (170 millones de euros),
de forma que si el precio de
compra
supera el mínimo, el número de acciones a amortizar será inferior.
La
recompra de acciones permite dotar de liquidez a los accionistas, y es una
forma de retribuir al accionista
que, en general, es más beneficiosa, o por lo
menos
no más costosa, desde el punto de vista fiscal que otras alternativas.
Fuente: Informe para la Junta General de
accionistas (Septiembre 2007)
Pues bien, esa situación financiera
excelente y totalmente saneada, que nos había permitido sortear y salvar las
dificultades, en momentos como el actual, de crisis del mercado, se terminó en ese
preciso instante. Esa retribución a los accionistas, dejó a la empresa en una
situación de precariedad financiera muy peligrosa.
Por si ese fuera poco riesgo para la
estabilidad de nuestros puestos de trabajo, en estos últimos años, hemos visto
cómo se multiplicaban las reclamaciones de los clientes por la mala calidad del
producto que se les enviaba, con el riesgo que eso representa para las ventas
futuras y con el enorme coste añadido que todo eso ha representado en muchas de
las ocasiones.
Y, lo peor de todo, nos hemos encontrado
con una Dirección de empresa totalmente desorientada, incapaz de resolver estos
problemas y que ahora, nos ha presentado un Plan de acción para los años
2016-2017, con el que ha pretendido cargar sobre los trabajadores las consecuencias
de sus malas acciones.
Le recordamos al Sr. López de las Heras que los trabajadores, ni somos los responsables de su mala gestión, ni hemos sido los causantes de que TRI se encuentre con una situación financiera delicada, ni hemos recibido “bonus” en los años de vacas gordas, y, por tanto, no puede hacer recaer sobre nosotros las consecuencias de los problemas que ellos han contribuido a causar.
Además, el hecho de reducir gastos, a
costa de reducirnos derechos y salario a los trabajadores, no garantiza en
absoluto que vaya a ser la solución a los problemas de la empresa, ya que, como
decimos, hay una mala gestión que, si no cambia, seguirá llevando a esta
empresa a la ruina, por mucho que reduzcan el gasto en personal.
De hecho, la propia Dirección ha
reconocido que con estas medidas no sería suficiente y que habría que
complementarlas con otras actuaciones que, de momento, no han dicho en qué
consistirían.
Durante este periodo de consultas, la dirección, los únicos documentos
justificativos que nos ha entregado, han
sido los PowerPoint que nos enseñaron a
todos los trabajadores el pasado día 4 de noviembre, además de algún recorte de
prensa. En ningún momento nos han facilitado datos económicos de la empresa, a
pesar de habérselos solicitado en
diferentes ocasiones, por lo que hemos tenido que recurrir a internet para conseguirlos
a través de la página de la Comisión Nacional del Mercado
de Valores (CNMV) y poder llevarlos a los economistas del sindicato para que
nos asesoraran sobre la situación real de la empresa. También hemos solicitado la
masa salarial de los trabajadores y trabajadoras fuera de convenio, a lo que la dirección se ha
negado rotundamente.
Por todas estas razones, el Comité, de
forma unánime, se ha negado a aceptar la bajada de salarios que se nos ha
propuesto, y ha pedido, en varias ocasiones, que se dé por finalizado el
período de consultas.
El 15 de febrero, por fin, se ha cerrado
este periodo de consultas, SIN ACUERDO.
Aunque la dirección ha insistido en la necesidad de continuar trabajando para
reducir costes, por la viabilidad de la empresa, y ha dicho que hará todo lo
que organizativamente y legalmente esté en su mano para conseguirlo.
Exigimos a la Dirección de TRI que
respete nuestros derechos y que busque otras soluciones a los problemas de la
empresa, porque sólo volviendo a la senda del trabajo bien hecho y de una
gestión eficaz seremos capaces de garantizar su viabilidad y el mantenimiento
de nuestros puestos de trabajo.
Los
trabajadores estamos dispuestos a contribuir para encontrar una salida a los
problemas, pero no de la manera que se nos ha propuesto. No haremos dejación de
nuestros derechos para ver cómo se van por ese agujero negro que la Dirección de
TRI es incapaz de cerrar.